La imitación de Cristo en su pobreza, mansedumbre y humildad, su devoción a la Eucaristía, a la Palabra de Dios y al Sagrado Corazón.
Un deseo de vivir el gozo y la sencillez de las Bienaventuranzas e identificarse con los pequeños del Evangelio.
En todas nuestras necesidades, tanto espirituales como temporales, así como una devoción viva a San José, patrón y protector de la Congregación.
Abrazamos las riquezas de todos los pueblos, rezamos por las necesidades de la Iglesia, y creemos que todos somos hijos de nuestro Padre Celestial.
Santa Juana Jugan nos enseñó que ir al Corazón de María es ir a Jesús. Tomamos a María como nuestra madre y nuestro modelo de amor total a Cristo y a su misión.
Santa Juana Jugan
Apreciamos el valor del silencio. Por este motivo nos esforzamos por mantener un clima de serenidad y de paz en los lugares destinados a la comunidad.
Generalmente tomamos nuestras comidas en silencio.
A lo largo del año, los días consagrados al retiro espiritual son deseados y apreciados por todas ya que nos ayudan a renovar y fortalecer nuestra vida espiritual, dejando de lado la rutina del trabajo cotidiano.
Una vida espiritual profunda es una fuente escondida pero fecunda; de ella se alimenta continuamente nuestra vocación de amor y la entrega en el servicio.
Es la fuerza que unifica los diferentes elementos de nuestra vida, llevándonos a un equilibrio entre la contemplación y la acción.