Leclerc, puede sonar a nombre de hipermercado, pero no, aquí queremos referirnos a este hijo de San Francisco de Asís, autor conocido mundialmente por sus escritos, pero especialmente por su obra maestra, que vio la luz en 1959, Sabiduría de un pobre, editada en numerosas ocasiones y traducida a unos 16 idiomas.

El 13 de mayo el Padre Eloi Leclerc, que residía hacía ya algunos años en la casa de las Hermanitas de los Pobres de Saint-Servan (Francia), a sus 95 años de edad, cerró sus ojos para este mundo abriéndolos sólo para Dios.

El Hno. Leclerc supo acercarse con corazón humilde al alma de Santa Juana Jugan, llegando a comprenderla maravillosamente. Con ese don que le caracterizaba, supo transmitir con mucho acierto el interior de la santa bretona en dos libros editados en varias lenguas: El desierto y la Rosa (2001, Ed. San Pablo) y Santa Juana Jugan. Ternura de Dios para la Tierra (2009, Ed. Edibesa).

Un gran amigo se nos ha ido, o mejor dicho, intercede más y mejor por nosotros. Él continúa a guiar la trayectoria de los que aún peregrinamos hacia la patria verdadera.

“Hacer felices a los pobres” es el carisma de las Hermanitas de los Pobres. Viviendo en medio de ellos, sin ninguna distancia, las Hermanitas están llamadas a ser, para cada uno de ellos, la revelación de la ternura de Dios. Las Hermanitas de los Pobres son, con toda humildad, esta maravillosa epifanía de la Ternura de Dios para la Tierra. Si no, no serían realmente las Hermanitas de los Pobres.
Eloi Leclerc (del libro El Desierto y la Rosa)